La Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ) lanzó una advertencia sobre la venta en Argentina de juguetes retirados en otros países y encendió una señal de alarma en el sector. Sin embargo, para quienes conocen de cerca el circuito comercial, el problema no resulta sorprendente. Así lo expresó Gustavo Fernández, presidente de la Cámara de Librerías y Jugueterías de Mendoza, quien aseguró que el ingreso de este tipo de mercadería insegura es una situación posible y frecuente.   “No me extrañaría”, afirmó Fernández, al referirse a la detección de juguetes con antecedentes de peligrosidad vendidos en el país.Incluso, el especialista advirtió que estos productos no solo ingresan a través de plataformas digitales de compra internacional, sino también por “vías ilegales y mercados informales”. Según explicó el dirigente, el problema excede al comercio electrónico y apuntó a la debilidad de los controles fronterizos y al ingreso constante de productos sin certificación.   “Puede llegar mercadería de forma ilegal y que vengan productos con esas características que comenta la Cámara Argentina”, señaló en diálogo con El Sol. En cuanto a las zonas “sensibles” del país, Fernández mencionó que la clave, en su mayoría, está en el norte.   “En el norte con Jujuy, en Misiones, que entra mucha mercadería por Paraguay. Ese flujo irregular facilita la llegada de juguetes sin autorización, advertencias de seguridad ni trazabilidad”, sentenció   Del comercio informal a ferias Lejos de coincidir con lo expuesto por la Cámara Argentina de la Industria del Juguete, Gustavo Fernández dejó en claro que el riesgo no se limita a una compra online desde el exterior.    “No es necesario que entren a través de plataformas digitales. Vas al ‘Persa’ o a cualquier lado y te podés encontrar con esa mercadería, incluso en ferias de juguetes”, detalló.   Esta situación amplía el alcance del problema y expone a las familias a productos potencialmente peligrosos que se comercializan sin ningún tipo de información clara sobre su origen, materiales o certificaciones. El riesgo para los niños Las advertencias de la CAIJ incluyen juguetes retirados en Estados Unidos, Canadá y México por riesgos graves como asfixia, toxicidad química o ingestión de baterías.    Desde el sector formal recordaron que los juguetes fabricados en Argentina cuentan con certificación, estándares de seguridad y trazabilidad, y son producidos por PyMEs que cumplen con la normativa vigente. La llegada de productos importados inseguros, sin controles ni exigencias regulatorias, no solo pone en riesgo a los niños y niñas, sino que también genera una competencia desleal para la industria nacional.   En este contexto, los especialistas insistieron en la necesidad de extremar cuidados al momento de elegir juguetes y recomendaron verificar certificaciones, desconfiar de productos sin información clara y priorizar comercios habilitados. Además, subrayaron la importancia de denunciar artículos sospechosos que puedan comprometer la seguridad infantil.   Los casos detectados La CAIJ advirtió sobre cuatro juguetes que se venden en plataformas argentinas pese a haber sido retirados del mercado en otros países por graves riesgos para la salud infantil. Entre ellos figuran:    Disfraz infantil con químicos tóxicos Uno de los casos señalados es el disfraz infantil SKCAIHT Sirena, retirado el 11 de diciembre de 2025 por la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de Estados Unidos (CPSC). El organismo determinó que el producto contenía ftalatos, compuestos químicos prohibidos por su toxicidad y por los riesgos que representan para la salud si son ingeridos por niños.     La CPSC ordenó el retiro inmediato del mercado y la devolución del dinero a los compradores. Sin embargo, el disfraz continúa ofreciéndose en Argentina mediante plataformas de compra internacional, sin ningún tipo de advertencia institucional. Juguete para bebés con riesgo de asfixia Otro producto bajo la lupa es el Silver Lining Cloud Activity Gym de Skip Hop, un gimnasio para bebés que fue retirado en Estados Unidos, Canadá y México. La decisión se tomó luego de detectarse que algunas piezas pueden desprenderse y generar riesgo de asfixia. De acuerdo con reportes oficiales de la CPSC, se registraron doce casos en los que niños llevaron partes del juguete a la boca, una situación que encendió las alarmas de las autoridades sanitarias. Muñecas con peligro por baterías botón El conjunto de Muñecas Unicornio y Princesa Bettina también figura en el listado. Según los registros estadounidenses, este producto coincide con un juguete retirado del mercado por el riesgo grave de lesiones o muerte ante la posible ingestión de baterías botón, uno de los peligros más severos identificados en la infancia. Este tipo de baterías puede provocar quemaduras internas y daños irreversibles en cuestión de horas, motivo por el cual su uso en juguetes está fuertemente regulado en numerosos países. Riesgo de asfixia y muerte por diseño inseguro El cuarto ejemplo es el Zippee Silicone Activity Toy. Un informe de la CPSC fechado el 20 de noviembre de 2025 determinó que los extremos esféricos del juguete pueden alcanzar el fondo de la garganta de los niños, generando riesgo de asfixia o muerte, en clara violación de las normas internacionales de seguridad. Fuente: El Sol Diario